Expectativa por la reunión del Gobierno porteño con escuelas

Tras casi un mes de conflicto y más de 30 escuelas tomadas, finalmente este miércoles se reúnen los representantes de unas 140 instituciones porteñas con la ministra de Educación de la Ciudad, Soledad Acuña, para intentar bajar los desibeles en medio del reclamo a la reforma laboral que planea el Gobierno porteño.

La iniciativa, entre otros puntos, establecería pasantías laborales «obligatorias» en el último año de secundaria, lo que despertó la furia estudiantil. Sin embargo, gran parte de los colegios afectados y los que se suman a la protesta son provinciales y no están incluidos en el nuevo diagrama lectivo. El caso más llamativo es del Carlos Pellegrini y el Nacional de Buenos Aires: ambos no dependen de la Ciudad sino de la Universidad de Buenos Aires (UBA), por lo que tampoco se verían perjudicados por la reforma.

El encuentro se lleva a cabo en la sede de la Defensoría del Pueblo de la Ciudad, que se propuso como mediadora de este extenso debate. «La reunión es un primer paso para comenzar a trabajar en propuestas, y hay que hacerlo con voluntad constructiva», dijo el titular del organismo, Alejandro Amor.

En época de elecciones, Acuña salió en las últimas horas a embestir contra los alumnos involucrados en la toma y hasta le pegó a partidos políticos como impulsadores de la medida.

«Acá hay demasiados actores políticos y partidarios que están tomando partido de esto. El FIT, el Frente para la Victoria y algunos sindicatos docentes están detrás de esto», afirmó la funcionaria. «Llevan la comida, los parlantes, hasta los grupos de música, y acompañan a los alumnos en las manifestaciones», polemizó.