Histórica y multitudinaria protesta contra el régimen cubano

Published On 12/07/2021

Al grito de “libertad” y “abajo la dictadura”, miles de personas marcharon en el país caribeño. El presidente Miguel Díaz-Canel se presentó ante la televisión nacional para convocar a sus seguidores a salir a las calles a “enfrentar” a los manifestantes.


Cuba vivió este domingo la mayor protesta masiva de su historia reciente. Por primera vez en más de 60 años, miles de personas se lanzaron a las calles en una veintena de poblados y ciudades a lo largo y ancho de la isla al grito de “libertad” y “abajo la dictadura”.

Ante la magnitud de las manifestaciones, el presidente Miguel Díaz-Canel se presentó ante la televisión nacional para convocar a sus seguidores a salir a las calles a “enfrentar” a los manifestantes.

“La orden de combate está dada: a la calle los revolucionarios”, afirmó el mandatario, quien atribuyó la actual crisis que vive la isla al embargo de Estados Unidos y a las medidas adoptadas por el gobierno de Donald Trump.

Las protestas se iniciaron en la ciudad de San Antonio de los Baños, en el suroeste de La Habana y se extendieron como chispa en polvorín por todo el país.

“Esto es por la libertad del pueblo, ya no aguantamos más. No tenemos miedo. Queremos un cambio, no queremos más dictadura”, dijo una manifestante en San Antonio.

Alejandro, quien participó en la protesta en Pinar del Río, le contó a la BBC que en su provincia la gente salió a la calle tras ver en las redes sociales lo que estaba pasando en San Antonio de los Baños.

“Vimos la protesta en las redes y la gente empezó a salir. Este es el día, ya no aguantamos más”, dijo el joven vía telefónica.

“No hay comida, no hay medicinas, no hay libertad. No nos dejan vivir. Ya nos cansamos”, agregó.

Tras la convocatoria del Díaz-Canel, se reportaron contramanifestaciones en algunas provincias.

Algunos videos muestran a decenas de seguidores del gobierno con pancartas de Fidel Castro, banderas cubanas y del Movimiento 26-7 (creado por Castro en su juventud), gritando consignas a favor del mandatario cubano y en contra de EE.UU.

Las protestas de este domingo, que fueron duramente reprimidas según muestran numerosos videos y cuentas de redes sociales, son un hecho sumamente inusual en una isla donde la oposición al gobierno no está permitida.

Las protestas de 1994

La Revolución cubana había literalmente tocado fondo tras el colapso soviético. Fidel Castro había analizado incluso la opción de retirar todo el dinero circulante y sobrevivir bajo una economía de guerra sin moneda de cambio.

Los cubanos vivían pedaleando por todos los rincones de la isla con sus bicicletas chinas a falta de combustible que hiciera andar sus viejos autos rusos. La comida y los productos de primera necesidad escaseaban. El embargo arreciaba. Los apagones llegaron a durar hasta 20 horas al día. El gobierno comenzaba un tímido proceso de reformas económicas cuya apertura principal estaba dirigida a la actividad privada y al turismo con la mirada puesta en la llegada de inversiones extranjeras.

El descontento en una parte de la población era evidente. El fenómeno de los “balseros” estaba en auge. Eran simples cubanos que se lanzaban al mar en precarias balsas rumbo a Estados Unidos. Los que lograban sortear a las lanchas navales cubanas se adentraban en un peligroso viaje en el estrecho de la Florida. La ebullición social llegó a un punto tal que un grupo de cubanos secuestró una lanchita de transporte que cruzaba la bahía habanera desde La Habana Vieja al municipio de Regla con los pasajeros a bordo.

Entonces cientos de cubanos empezaron a merodear por la zona del puerto, en la misma zona donde partían esas mismas lanchas. El estallido era cuestión de tiempo.

El 5 de agosto de 1994 cientos de cubanos salieron a las calles de La Habana para reclamar “libertad” en las primeras protestas populares contra la Revolución desde 1959. Los manifestantes rompieron a su paso los vidrios del tradicional hotel Deauville, a 100 metros del Malecón habanero y amenazaban con desatar una crisis sin precedentes en el gobierno cubano.

Pero de pronto apareció Fidel. Montado en un jeep militar, la figura de Castro se divisó por una de las calles internas del barrio de Centro Habana y la manifestación terminó.

Primero fue un rumor, murmullos. La gente se miraba entre sí y preguntaba si era verdad. Hasta que alguien gritó: – ¡Ahí viene Fidel!

Y pasó lo que nadie pensó que podía suceder. La enorme mayoría de los manifestantes salió corriendo a la vista de un grupo de corresponsales extranjeros testigos del hecho. Los que se animaron a quedarse permanecieron quietos y cuando el jeep apareció con el líder cubano en el asiento del acompañante se mimetizaron con los grupos de revolucionarios que venían detrás del vehículo militar.

Entonces, quienes un momento antes clamaban por libertad empezaron a gritar por Fidel. La manifestación fue disipada por la figura del mayor de los hermanos Castro, que bajó del jeep y encaró a las cámaras.

“Escuché que estaba lanzando piedras o balas y vine aquí a poner el cuerpo para llevarme mi cuota de piedras y balas”, dijo, palabras más palabras menos el entonces presidente cubano. Después, Castro le pasó el problema al gobierno del entonces presidente estadounidense Bill Clinton: abrió las fronteras para todos aquellos que quisieran marcharse de la isla. Lo que siguió fue un éxodo de unos 40 mil “balseros” cubanos rumbo a Estados Unidos.

Pero hoy no está Fidel. Y el presidente Miguel Díaz-Canel, sucesor de Raúl Castro, no tiene ni el carisma, ni la popularidad, ni tampoco el poder del viejo líder.

El presidente de Cuba acusó a EEUU

El presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, denunció el lunes que Estados Unidos tiene “una política de asfixia económica para provocar estallidos sociales en el país”, un día después de protestas históricas contra el gobierno.

En una transmisión en directo en la televisión, el mandatario dijo que su gobierno ha tratado de “enfrentar y de vencer” las dificultades “ante una política de asfixia económica para provocar estallidos sociales en el país”.

Acompañado de miembros de su Ejecutivo y del Buró Político del Partido Comunista de Cuba (PCC, único legal), el mandatario afirmó que las protestas masivas del domingo en toda Cuba buscaban “fracturar la unidad de nuestro pueblo”.

Biden instó a que el régimen cubano «escuche a su pueblo»

El presidente estadounidense Joe Biden hizo un llamado al régimen cubano para que escuche a su pueblo y su reclamo de libertad y ayuda en la crisis vinculada a la pandemia. ”El pueblo cubano está exigiendo valientemente el reconocimiento de los derechos fundamentales y universales después de décadas de represión y sufrimiento económico causado por un régimen autoritario”, dijo Biden en un comunicado emitido por la Casa Blanca.

”Estos derechos incluyen el derecho a protestar pacíficamente y a determinar libremente el futuro. Derechos que deben ser respetados”, agregó el mandatario. ”Estados Unidos pide al régimen cubano que, en lugar de enriquecerse, escuche a su pueblo y atienda sus necesidades en este momento vital”.

El gobierno cubano acusó a Washington de estar detrás de las inéditas protestas registradas el domingo en la isla. El presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, dijo el lunes que las sanciones económicas de Estados Unidos eran la causa de la agitación, calificándolas de “política de asfixia económica para provocar estallidos sociales en el país”.