El oficialismo avanza con la reforma que reduce la mayoría para elegir al procurador General
Senadores del Frente de Todos presentaron la propuesta que además acota a cinco años el mandato.
Los senadores del Frente de Todos presentaron este viernes su dictamen para reducir la mayoría requerida para elegir al procurador General a 37 votos y otorgar mayor poder a la Comisión Bicameral de Seguimiento y Control del Ministerio Público.
En la reunión de la Comisión de Justicia que encabeza Oscar Parrilli, la santafesina María de los Ángeles Sacnun hizo un resumen del proyecto al que le darán dictamen en el transcurso de la jornada y que propone que la elección del jefe de los fiscales en el Senado deje de ser por dos tercios y sea por mayoría absoluta.
Sacnun señaló ese punto fue tomado de «lo que se planteaba en el proyecto de ley suscripto en su momento por los ex senadores (Federico) Pinedo, (Miguel) Pichetto y (José) Urtubey» y explicó que además se acota el mandato del procurador -hoy vitalicio- a cinco años.
Además, indicó que «para implementar el modelo acusatorio es fundamental un política criminal del Estado que sea absolutamente controlada por el Congreso», a través de la Comisión Bicameral.
Por su parte, el rionegrino Alberto Weretilneck, aliado del oficialismo y autor del proyecto que sirvió de base para el dictamen que presentó el Frente de Todos, subrayó que «prácticamente no hay países con el cargo de procurador general a perpetuidad».
Rechazo de fiscales
Unos 80 fiscales rechazaron este viernes la posibilidad de que se modifique la forma en que se elige al procurador general de la Nación y consideraron que si se reduce la cantidad de votos necesarios para hacerlo, «sería una involución».
Los miembros del Ministerio Público plantearon su postura en una carta dirigida al presidente de la Comisión de Justicia y Asuntos Penales del Senado, Oscar Parrilli.
Los fiscales firmantes explicaron que la ley del Ministerio Público «cuidó de cumplir este mandato y estableció que el Procurador General de la Nación debía ser nombrado con acuerdo del Senado, con los dos tercios de los presentes».
«La ley quiso que su designación surgiera de una concertación de las fuerzas políticas y de la representación federal de que se encuentra investido ese cuerpo legiferante», agregaron.
En concreto, criticaron el intento de modificación de la elección del jefe de los fiscales, que podría pasar a necesitar de una mayoría simple en la Cámara alta.
«La mayoría simple, significaría refrendar un Procurador por un mismo partido o coalición de gobierno a la que pertenece el Poder Ejecutivo que lo propone, significando una involución; un retroceso a la situación anterior a la Constitución del año 1994», resumieron.
Por otra parte, también se refirieron al intento de modificar la integración del jurado de enjuiciamiento. «La reforma también parece incluir el régimen disciplinario y de remoción de los fiscales, por lo cual debe cuidarse que no se establezcan mayorías que puedan afectar la imparcialidad de las decisiones del tribunal de enjuiciamiento y en definitiva el debido proceso, en detrimento de la estabilidad y autonomía en el ejercicio de sus funciones», indicaron en la carta.
En ese sentido, pidieron a los legisladores «que piensen antes en las instituciones que en la coyuntura, que no poder nombrar un procurador porque no se logra el consenso necesario no puede justificar desnaturalizar una institución constitucional».