Efectos del triunfo K: histórico derrumbe de las acciones argentinas y un dólar sin control
Un golpe de knock out recibió el Gobierno este domingo cuando el ministro Rogelio Frigerio comunicaba en conferencia de prensa que el Frente de Todos vapuleaba a la fórmula oficialista por más de 15 puntos. Faltará decidir el resto de los cargos nacionales, provinciales y municipales, pero la reelección presidencial parece una misión imposible para Mauricio Macri en estos momentos.
El categórico triunfo del kirchnerismo en casi todo el país -incluida la paliza de Axel Kicillof a María Eugenia Vidal- deja secuelas en los mercados y la situación económica se agudizará con el correr de las horas. Allí entrará en juego la estrategia de la Casa Rosada: centrarse en la gobernabilidad y no complicar aún más un escenario totalmente oscuro.
Y tal como se esperaba, el dólar ya tocó los $60 y las acciones argentinas que cotizan en Wall Street sufren la caída más grande de la historia. Los inversores y operadores del mercado local buscan desarmar posiciones lo antes posible, y el Gobierno no reacciona.
El Presidente analizará cambios en la gestión con sus ministros, aunque por el momento no se prevé que haya cambios en la estructura de funcionarios. Esta mañana el primero en llegar a la Casa Rosada fue el jefe de Gabinete, Marcos Peña. Después llegó el presidente del BCRA, Guido Sandleris, que estuvo una hora y se fue.