Caso Nisman: comprueban que se podía ingresar a las torres Le Parc sin dejar rastros
Lo determinó un estudio judicial. Hay zonas que no son alcanzadas por las cámaras del edificio, donde encontraron muerto al fiscal federal.
Después de que la Justicia determinó que la muerte de Alberto Nisman fue un homicidio descartando la hipótesis inicial del suicidio, la fiscalía a cargo de Eduardo Taiano tomó declaración testimonial a 500 vecinos del lugar y concluyó que el sistema de seguridad de la torre Le Parc de Puerto Madero era “falible”.
Al mismo tiempo se realizó una renderización del lugar donde detectaron “puntos ciegos” que no son captados por las cámaras de seguridad. De este modo, sostienen que cualquier persona podía ingresar al edificio sin ser detectado por las cámaras.
La renderización es una representación gráfica a través de un sistema informático que produce una imagen fotorrealista con formato 3D. En esta oportunidad se ubicaron todas las cámaras de seguridad de los espacios comunes y del Le Parc en general y se simularon recorridos pasando por todos los ángulos de aquellas cámaras.
El resultado arrojó la existencia de “espacios ciegos”. “Hay muchos lugares por los cuales se pueden pasar sin ser registrados por las cámaras de seguridad, por el tipo de ubicación que tienen y el ángulo de cobertura de las mismas. Esto fue probado desde varias perspectivas y posibilidades. La conclusión a la que se arribó fue la misma: hay muchos sectores de circulación de Le Parc que “no son registrados por ninguna cámara de seguridad”, dicen quienes trabajaron en el estudio a Clarín.
Esto, según fuentes judiciales, corrobora que el ingreso, circulación y egreso del complejo donde vivía Nisman, no era realmente controlado y que los registros existentes al respecto, son “incompletos y en algunos casos, mal confeccionados, hay muchos espacios por donde se podría permanecer en el lugar sin ser vistos”.
De este modo buscan avanzar hacia la búsqueda del autor material del homicidio del ex fiscal, ya que el juez Julián Ercolini dio por corroborado que se trató de una muerte violenta pero sin poder aún encontrar responsables.
Por otro lado, se determinó la ubicación de las cámaras y sus “puntos ciegos”. Para lograr un mejor estudio del caso, la fiscalía le tomó declaración testimonial al técnico que realizaba tareas de mantenimiento sobre dichos equipos.
Los testimonios de los vecinos pusieron sobre relieve que “Le Parc no era infranqueable como se buscó instalar desde un comienzo”, indicaron fuentes de la investigación. De este modo, la fiscalía ratificó el argumento del juez Ercolini y que confirmó la Sala II de la Cámara Federal porteña, hace un año y es que “la muerte del fiscal Nisman no obedeció a un suicidio y habría sido producida por terceras personas y en forma dolosa”.
Con información de Clarín