Absolvieron a César Milani en la causa por la desaparición del soldado Ledo
«Estoy de pie, no me van a quebrar», dijo el ex jefe del Ejército ante el Tribunal Oral en sus últimas palabras antes de que se conozca el veredicto. Al excapitán Esteban Sanguinetti, el otro acusado, le dieron 14 años.
El Tribunal Oral Federal de Tucumán absolvió este viernes al exjefe del Ejército César Milani por la desaparición del soldado Alberto Agapito Ledo en 1976. Por ese crimen de la última dictadura, la querella que representa a la familia de la víctima había pedido seis años de prisión para Milani y prisión perpetua para el otro acusado, el excapitán Esteban Sanguinetti, al que finalmente le dieron catorce años de cárcel.
Milani, ex funcionario del gobierno de Cristina Fernández de Kirchner, fue acusado de falsear un acta sobre la presunta «deserción» de Ledo, mientras que a Sanguinetti se lo apuntaba por la desaparición del soldado.
Una de las abogadas de la querella aseguró que con las declaraciones de los testigos “quedó demostrado que el 17 de junio de 1976 Ledo fue sacado a la 1 de la mañana del campamento de Monteros por Sanguinetti y no volvió más». «Ledo estaba identificado como militante marxista, del Partido Revolucionario de los Trabajadores y de la universidad», destacó Viviana Reynoso.
Adriana Mercado Luna, otra de las letradas querellantes, apuntó que Ledo fue secuestrado y enviado a un centro clandestino de detención. «Sanguinetti desplegó una conducta homicida a partir de la privación ilegítima de la libertad de Ledo, que fue trasladado a Arsenales (un centro clandestino de detención donde fue visto por dos testigos por última vez) y finalmente ultimado».
Con respecto a Milani, lo acusaron de «elaborar el acta de deserción» del soldado «cuyo contenido es falso», y de firmarla por orden de Sanguinetti, que era su superior. Además, «con declaraciones falsas Milani intentó encubrir a Sanguinetti «, agregaron, y solicitaron al tribunal seis años de prisión para el exjefe del Ejército kirchnerista, algo que no ocurrió luego de declararlo libre de toda culpa en este caso.
Al comenzar en octubre el juicio oral y público en Tucumán, el exjefe del Ejército del gobierno de CFK negó las acusaciones. “Esta causa fue absolutamente armada como tantas otras, esto no es casualidad. Esta feroz campaña que se desplegó contra el jefe del Ejército obedece a muchos motivos», afirmó ante los jueces del tribunal.
Y completó: «Nunca, hasta el año 2013, nadie me citó en ningún expediente, nadie escuchó mi nombre, nadie me nombró bajo ningún punto de vista. No cumplí órdenes ilegales, nunca encubrí, nunca torturé, nunca secuestré y no conozco lo que es un centro clandestino de detención«.