JxC baja la tensión interna con el sello de un pacto político de convivencia

Published On 02/08/2021

Los referentes de la coalición llegaron a un acuerdo que reemplaza al “código de ética”. La Mesa Nacional de la oposición se va a reunir todas las semanas y será la garante de que se cumpla el convenio de no agresión.


La principal coalición de la oposición consiguió un “alto al fuego” en medio del enfrentamiento interno entre referentes y precandidatos a las elecciones legislativas. Los líderes de Juntos por el Cambio debatieron por Zoom y alcanzaron un “acuerdo político de convivencia entre todos los partidos” que integra la coalición, indicaron fuentes de este espacio.

La Mesa Nacional de la coalición se va a reunir todas las semanas y será la garante de que se cumpla con el pacto de no agresión, que va a reemplazar al “código de convivencia” que impulsaba el espacio para terminar con los duelos verbales de los integrantes de esta agrupación.

Uno de los referentes de Juntos por el Cambio que participó del encuentro virtual planteó que “no hacía falta un código de ética ni un manual” para bajar la tensión y evitar el fuego cruzado. Consideró que un manual hubiera expuesto a la coalición como “un gran espacio de confrontaciones”.

El objetivo del acuerdo pasa por tratar de consensuar “los cuatro o cinco ejes que los precandidatos deberán priorizar en todas las provincias” con el foco en que la unidad debe ser “el valor máximo a defender”.

Durante la cumbre manifestaron que la sociedad les pide “unidad y fortaleza para frenar al kirchnerismo” y que por eso deben mostrar concordancia. Los referentes de la coalición aseguraron que durante la reunión “no se habló de ninguna persona en particular, ni se hizo alusión a ningún episodio en particular”.

Explicaron que se diagramará un informe entre las tres fundaciones, Alem (UCR), Pensar (PRO) y Hannah Arendt (Coalición Cívica) “con los principales acuerdos programáticos que se trabajaron en conjunto”.

En la reunión virtual participaron el expresidente Mauricio Macri desde Suiza, el jefe de Gobierno porteño Horacio Rodríguez Larreta, la precandidata a diputada nacional por la ciudad de Buenos Aires María Eugenia Vidal, el presidente de la Coalición Cívica Maximiliano Ferraro, la titular de PRO Patricia Bullrich y el titular del interbloque en Diputados, el radical Mario Negri.

Además del diputado y presidente de la UCR Alfredo Cornejo, la integrante de la Coalición Cívica Maricel Etchecoin, el auditor General de la Nación Miguel Ángel Pichetto, los diputados Juan Manuel López y los senadores Luis Naidenoff y Humberto Schiavoni.

Sin una “silla” en la reunión virtual, el gobernador de Jujuy y uno de los hombres fuertes radicalismo, Gerardo Morales, había alzado su voz al advertir en declaraciones a radio La Red que no compartía el concepto de código de convivencia ya que “eso es más bien para un jardín de infantes; las cosas se hablan, la palabra se da y se cumple”.

La tensión entre la UCR y el PRO tuvo picos de extrema algidez cuando el precandidato Facundo Manes le reclamó al oficialismo porteño que no use fondos públicos para la campaña de Santilli en la provincia de Buenos Aires.

A partir de esa primer dardo, los integrantes del PRO hicieron fila para devolverle gentilezas al neurólogo: «Facundo, decís que llegás para sacar lo mejor del potencial argentino pero solo sembrás desconfianza y dudas en tu propio espacio. No caigas en las peores costumbres de la vieja política si querés renovación. El Frente de Todos ya no necesita más candidatos”, le dedicó el exministro de Seguridad bonaerense, Cristian Ritondo.