Larreta gestiona con EEUU la llegada de vacunas demoradas de AstraZeneca
El jefe de Gobierno porteño conversó con la encargada de Negocios norteamericana Mary Kay Carlson, sobre el envío de cerca de 900 mil dosis que aún no arribaron a la Argentina.
El jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, mantuvo una reunión con la encargada de Negocios de los Estados Unidos, Mary Kay Carlson, para sumarse a las gestiones que buscan destrabar la llegada de las demoradas vacunas de AstraZeneca.
Larreta acompañó el pedido hecho por el Gobierno del presidente Alberto Fernández ante Estados Unidos por las vacunas de ese laboratorio que la Argentina compró y todavía no llegaron al país.
El mandatario porteño estuvo acompañado por el secretario general del Gobierno de la Ciudad, Fernando Straface, mientras que Carlson llegó a Uspallata junto al consejero político James O’ Mealia y el consejero de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente James Michael Saxton Ruiz.
Al igual que el Gobierno nacional, Rodríguez Larreta conversó con Carlson sobre la posibilidad de que lleguen al país las cerca de 900 mil vacunas que AstraZeneca envió a Estados Unidos para su envasado y que, pese a lo previsto, todavía no llegaron a la Argentina.
La semana pasada, la representante de la Casa Blanca escuchó el mismo planteo de parte de la ministra de Salud, Carla Vizzotti, y la asesora presidencial Cecilia Nicolini, quienes le dieron continuidad a la gestión iniciada en abril por Fernández, una reunión virtual con el director para el Hemisferio Occidental del Consejo de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Juan González.
El mandatario porteño tuvo un gesto de cooperación con Fernández, dado que ambos necesitan de la llegada de más vacunas para avanzar con la campaña de inmunización contra el coronavirus.
Además, si bien la Ciudad recibe su parte de los cargamentos de vacunas Sputnik V y Sinopharm, el Gobierno porteño advierte todos los meses sobre problemas de stock y, en ese contexto, se sumó a las negociaciones con países y laboratorios para tratar de traer más vacunas, como recientemente lo hizo también la Provincia de Buenos Aires.
Las autoridades de la administración de Rodríguez Larreta ya señalaron que cualquier nuevo lote de vacunas que pudieran conseguir será puesto a disposición del Gobierno nacional para su distribución, aunque el logro sería capitalizado políticamente de todos modos.
Las gestiones ante Estados Unidos obedecen no solo a que las vacunas que la Argentina esperaba recibir están en territorio norteamericano para su envasado, sino también al excedente de dosis con el que cuenta ese país, a tal punto que el estado de Florida ya usa esa disponibilidad para promover el turismo.
En medio de las especulaciones en torno a la posible decisión del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, de empezar a distribuir y vender esas vacunas -como hacen China y Rusia, sus rivales en el tablero global- la Argentina robustece su pedido con gestiones de la Nación y la Ciudad.
El tema de las vacunas demoradas es central para el Gobierno, al punto de que a fines de abril, luego de la reunión que Vizzotti mantuvo con el presidente de la filial argentina de AstraZeneca, Agustín Lamas, el canciller Felipe Solá afirmó que la Argentina tiene «un gran problema que se llama AstraZeneca».
Además, el contrato que el Gobierno nacional firmó con el laboratorio del empresario Hugo Sigman para acceder a 22 millones de dosis de la vacuna de AstraZeneca tras un pago anticipado de alrededor de 60 millones de dólares está en la mira de la Justicia por las demoras.
