El temor de Vidal ante la eventual aprobación del aborto
En la previa del debate de despenalización del aborto en el Senado, a María Eugenia Vidal se mostró preocupada por su eventual implementación en la Provincia. Ante sus ministros, la funcionaria advirtió las dificultades que afrontará el sistema de salud bonaerense para aplicar la ley, en caso de que se apruebe el próximo 8 de agosto.
“Si sale, lo vamos a cumplir; pero el proyecto tiene cuestiones complejas a la hora de su implementación”, sentenció Vidal, según pudo constatar Clarín de fuentes cercanas a la mandataria.
Su principal preocupación gira en torno al tiempo que prevé la ley para garantizar la interrupción voluntaria del embarazo -hasta la semana 14- de cualquier mujer que así lo solicite.
“No hay ninguna operación programada en la provincia que se haga en cinco días”, expuso, en alusión al plazo que fija el proyecto para que se concrete la interrupción del embarazo, una vez que una mujer expresa su voluntad. “¿Qué pasa si una mujer viene con 14 semanas de embarazo y no podemos darle respuesta? ¿Y si el o los médicos no creen que sea factible y se oponen?”, son algunos interrogantes que se le escuchó realizar.
La gobernadora instruyó al ministro de Salud Andrés Scarsi para que realizara un relevamiento de la situación en los hospitales bonaerenses. Y el análisis preliminar que recibió alimenta su preocupación.
“Tal vez sea necesario regionalizarlo, porque no todos los hospitales van a estar preparados para hacer frente a la demanda”, especuló. Entre los factores que enumeró Vidal para llegar a esta conclusión figura la objeción de conciencia de los profesionales. “Tenemos la percepción de que son mayoría. Y, en ese caso, ¿cómo hacemos?”, planteó.
El impacto fiscal es otro de los aspectos a tener en cuenta según Vidal: “No podemos calcular cuál va a ser la demanda y su costo. El misoprostol (usado para el aborto farmacológico) es caro”, sostuvo. Fue a contramano de lo que señaló el ministro de Salud de la Nación Adolfo Rubinstein, quien durante el debate indicó que “los costos del aborto se dan con las complicaciones” y que, por el contrario, “con el aborto seguro esos costos bajan dramáticamente”. Vidal descree de estos cálculos: “El no tiene hospitales a cargo”, es la respuesta que le dio a alguien que la consultó el tema.
Otro punto que inquieta a la gobernadora no tiene que ver con la infraestructura hospitalaria sino con la letra chica de la norma. “Dice que los menores que fueran acompañados por un adulto pueden abortar y no define qué adulto”, sostiene.
Pese a estas declaraciones, en el entorno de Vidal aseguran que cumplirá con su implementación. “Tal vez se requiera un período de ‘gracia’ para organizar el sistema, pero eso no está en duda”, confirmaron.