Otra vez la seguridad presidencial en alerta

Publicado el 13/05/2019

Un hombre intentó ingresar armado a la Casa Rosada, horas después se recibió una amenaza de bomba contra el mismo edificio y otra en el anexo de la Cámara de Diputados.


Jornada convulsionada para la seguridad presidencial. Durante la mañana este lunes, un hombre armado quiso ingresar a la Casa Rosada para entrevistarse cara a cara con Mauricio Macri, aunque fue interceptado por las fuerzas de seguridad antes de ingresar al edificio gubernamental.

El portafolio sospechoso en la puerta de la Casa Rosada. El jefe de la Policía Federal, Néstor Roncaglia, se encuentra en el lugar

El sujeto de 36 años, identificado como Francisco Ariel Muñiz, se presentó en Balcarce 50 alegando que tenía agendada una reunión con el mandatario. Al verificar que no figuraba en los registros oficiales, el personal de seguridad lo invitó a retirarse y antes de salir corriendo tiró un portafolio. Su reacción provocó la activación de los protocolos de emergencia y fue apresado a pocos metros.

La Brigada Antiexplosivos actuó con rapidez, revisó el portafolio plateado y constató que en su interior había una pistola mangum, calibre 44, con el número de serie limado. El arma, según confirmó la ministra de Seguridad Patricia Bullrich, no tenía municiones.

¿Quién es?

Muñiz buscó postularse en 2017 como candidato del PRO a consejero escolar suplente en la ciudad bonaerense de General Pinto aunque salió de la lista pocos meses antes de las elecciones. Se mantuvo ligado al PRO durante los primeros años de la presidencia de Mauricio Macri y militaba activamente.

«Era un chico muy comprometido con Cambiemos, nacido y criado en Pinto, pero en el último tiempo no fue parte del equipo. Se reformuló el equipo interno y quedó afuera, no tenía muchos seguidores, Ariel planteaba una ruptura interna en el movimiento a nivel local», aseguró un miembro del partido de Pinto.

El hombre detenido creó una página de Facebook llamada «Pro General Pinto», que no tenía relación institucional alguna con ese espacio en la ciudad bonaerense. Allí publicó afiches diseñados por él mismo, en los que aparecía su nombre y los logos de Pro y Cambiemos. En esa misma red social llegó a publicar un escrito en el que parecía autopostularse como intendente de General Pinto.

«INTENDENCIA
Si me preguntasen, si quiera ser candidato a INTENDENTE por General Pinto respondería que si. Tengo al menos cuatro proyectos, claras convicciones de las políticas públicas que puedo llevar a cabo, en un supuesto.
Entiendo perfectamente, lo que significa y a lo que conlleva, el trabajo en equipo.
El presidente de la nación Argentina, y la gobernadora de la provincia lo expresan desde que tomaron el mando.
Digamos, durante la gestión de éste nuevo equipo.
Considero que, en éstos pocos años, como militante PRO he sido leal a mis principios, y a un partido político (Propuesta Republicana), relativamente nuevo, adaptado al siglo XXI.
He sido «empleado» varios años en mi vida, esto expreso en mi
curriculum vitae, ahora elijo ser emprendedor independiente, cuidar mi vida privada Y LA DE MI FAMILIA, y poder al menos en una época difícil, generar empleo, y que las expectativas crezcan.
¿Puedo hacerme cargo de semejante investidura y representación de la ciudad? Claro, lo pensé muchas veces, lo tengo planificado hace varios años ya, tengo una planificación política (estrategia, al menos ahora que soy un civil) que podrá expresarse de forma ordenada en el transcurso de al menos cuatro años.

Gracias.

Francisco Ariel Muñiz«.

La tensión continuó pasado el mediodía cuando se recibió una amenaza de bomba contra la Casa de Gobierno y el anexo de la Cámara de Diputados, que obligó a la inmediata evacuación y el posterior operativo de la brigada de explosivos de la Policía Federal .

En la Rosada se siguió trabajando normalmente, mientras que en el Congreso se paralizaron las actividades y hasta se dudó de la presencia del Presidente Mauricio Macri para participar del velatorio de Héctor Olivares. De todos modos, se realizó a las 15.30 con total normalidad.