Deuda: venció el plazo y el Gobierno seguirá negociando para evitar el default

Publicado el 08/05/2020

Este viernes caducó el “deadline” para la primera oferta que presentó Argentina, que incluye un período de gracia de 3 años y una feroz quita de intereses. Las charlas seguirán hasta fines de mayo mientras se escuchan los retoques que pretenden los acreedores.

La primera etapa del canje de la deuda argentina venció este viernes y según estimaciones del gobierno, lo hizo con un bajo nivel de adhesión por parte de los acreedores, siendo los externos los más reticentes a aceptar la propuesta realizada por el gobierno nacional.

Si bien el anuncio oficial de las cifras se haría este sábado, trascendió que «ingresó el 70% de los tenedores de deuda en la Argentina a través de La Caja de Valores, equivalente a unos 5000 millones de dólares, menos del 10% de la deuda elegible», y aún resta conocerse el porcentaje agregado del exterior del país.

“Más allá del cierre formal, no se cierra la negociación en sí con los bonistas, dado que la prioridad argentina pasar por restaurar las condiciones para un cronograma ordenado y sustentable”, habían destacado desde el gobierno esta mañana.

La administración de Alberto Fernández enfrenta un vencimiento improrrogable: el 22 de mayo debe hacer frente al pago de 503 millones de cupones de intereses de tres bonos que, casualmente, están entre los elegibles para canjear.

Entre los analistas e inversores se da por descontado que el 8 de mayo pasará de largo y que las conversaciones seguirán hasta fines de mayo.

En caso de que la cifra de adhesión se ubique lejos de la mayoría necesaria, el ministro Martín Guzmán podría optar por realizar el canje en la próxima semana pero no se podría evitar el default, por lo que la negociación frente a los grandes inversores que rechazaron la oferta sería en condiciones de debilidad por parte de la Argentina.

Si la aceptación supera el 40%, el país contaría con un respaldo altamente necesario para continuar con las negociaciones a partir del próximo lunes.

«La Argentina permanece abierta al diálogo. Hicimos una oferta sostenible de buena fe y apreciamos que parte de nuestros acreedores ya la hayan aceptado«, había declarado Guzmán en una entrevista con Reuters al respecto, y agregó: «Continuamos trabajando para lograr el objetivo de restablecer la sostenibilidad de la deuda, volver a poner al país de pie y establecer una relación sostenible y duradera con nuestros acreedores».