El crimen del colectivero que trabajaba doble turno para terminar su casa

Publicado el 16/04/2018

El nuevo crimen de un colectivero vuelve a conmocionar al país y los delincuentes se ríen en la cara de la Justicia. Esta vez sucedió en Virrey del Pino el domingo por la tarde, cuando Leandro Miguel Alcaraz (26) conducía el interno 103 de la línea 620.

Según los primeros testimonios, dos pasajeros se subieron en San Justo y luego de advertir que no tenían la tarjeta para pagar los pasajes y comenzar una fuerte discusión, el chofer decidió llevar a ambos. Cuando los atacantes decidieron bajar del transporte, sin mediar palabra, efectuaron dos disparos y asesinaron a Alcaraz a sangre fría.

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Los tiros impactaron en el tórax y la cabeza del chofer, le provocaron la muerte y lo dejaron tendido e inconsciente en su asiento. Los dos malvivientes se dieron a la fuga y aún continúan prófugos. Uno de los pasajeros que viajaba en esa misma formación tomó el control del vehículo y manejó con urgencia hacia el hospital Evita.

Al momento de ingresar en centro médico, la víctima se encontraba ya sin vida pese a los intentos del pasajero de socorrerlo. Por esta tragedia, la UTA realiza durante todo el lunes y hasta las 12 del martes una medida de fuerza en toda la zona oeste en reclamo de justicia.

Antonio Petkosev, delegado de la línea 620, pidió que más testigos del hecho se acerquen a la comisaría y advirtió: “Antes nos asaltaban a la madrugada, pero esta semana hemos tenido tres hechos en plena tarde, robos. Esto cada vez se está poniendo peor”, lamentó.

Amigos de «El Cabezón», como lo apodaban, relataron que trabajaba doble turno hace un largo tiempo para poder terminar de construir su casa. Y como si fuera poco, aseguran que el día de su muerte no debía trabajar ya que tenía franco. Sin embargo, Leandro eligió demorar su día de descanso para este lunes, que es el cumpleaños de su hija y pretendía festejarlo junto a ella y su esposa.

Los choferes anunciaron un paro hasta las 12 de la noche de este lunes, se movilizaron y apedrearon las comisarías locales. Hasta el momento no hay detenidos por el crimen.