Con críticas a la Corte, Alberto Fernández apoyó la remoción de jueces
El presidente cuestionó al titular del máximo tribunal, Carlos Rosenkrantz, por acelerar el debate sobre los desplazamientos de Bruglia, Bertuzzi y Castelli. «A uno de esos jueces que es desplazado lo conozco desde que tengo 17 años, he tenido una relación personal, pero más allá de eso me es incomprensible lo que ocurrió», aseguró.
El presidente Alberto Fernández volvió a criticar este viernes a Carlos Rosenkrantz, titular de la Corte Suprema, y se preguntó “¿qué es lo que está buscando? al acelerar el debate sobre la remoción de jueces que investigan a Cristina Kirchner.
«¿Qué es lo que está buscando? cuestionó el mandatario previo a preguntarse «¿Cuál es la disyuntiva que tiene el presidente de la Corte, qué es lo que está buscando?», y considerar: «Yo me lo pregunto porque realmente cualquiera que ha estudiado derecho sabe que esto es un escándalo jurídico».
En relación a la situación puntual de los jueces Leopoldo Bruglia y Pablo Bertuzzi, Fernández aseguró que “llama mucho la atención y preocupa por los comentarios que llegan por cosas que se ven adentro de la Corte”, y consideró: “La verdad que lo único que estamos haciendo nosotros es restablecer un orden perdido en el Gobierno anterior”.
Por otro lado, el presidente remarcó que “se desataría un escándalo” y él decidiera colocar a un juez que le cae “simpático” en el espacio vacante dejado por Claudio Bonadío tras su fallecimiento. “¿Y qué pasaría si para las cuatro vacantes que hay en la Cámara Federal buscara a jueces que me caen simpáticos dentro de los tribunales federales y los hago camarista por un decreto?”, sumó.
“Eso es lo que hicieron. Y si yo quisiera aprovecharme de lo escandaloso que hicieron no estaría haciendo nada”, completó.
Por último, quien asumiera su cargo el pasado mes de diciembre negó que la remoción de esos magistrados responda a objetivos políticos y consideró: «A uno de esos jueces que es desplazado lo conozco desde que tengo 17 años, he tenido una relación personal, pero más allá de eso me es incomprensible lo que ocurrió».
«Es un problema institucional. Si fuera un canalla, lo que haría es hacerme el distraído y llenar las vacantes de la Cámara Federal con jueces que me resultan simpáticos», cerró.