Aumentan los atentados y los quiebres diplomáticos

Los ataques terroristas se volvieron una noticia de todos los días y no dan tregua. El último caso, en Londres el sábado pasado, donde una furgoneta embistió contra un grupo de peatones en el centro de la ciudad. Después, el vehículo se dirigió al mercado gastronómico de Borough Market y al bajar, comenzaron a acuchillar a la gente. Un hecho tenebroso que dejó un total de siete personas muertas y más de 50 heridos. Cabe recordar que dos semanas atrás, el Reino Unido sufrió otra similar tragedia en la ciudad de Manchester, cuando un hombre se inmoló en medio de los espectadores durante un concierto de la cantante Ariana Grande. Allí, 21 jóvenes perdieron la vida.

Las consecuencias salpicaron no sólo en el Reino Unido, sino también en la principales potencias de medio Oriente. Arabia Saudita y sus aliados: Emiratos Árabes Unidos, Egipto, Baréin, Yemén y Libia, rompieron relaciones diplomáticas con Qatar, acusándolos de apoyar al «terrorismo». Esa postura inicia una profunda crisis en la región días después de que el presidente Donald Trump llamara a la unidad de los árabes frente al extremismo.

En este contexto, la primer ministra británica, Theresa May, anunció un plan más riguroso para endurecer las medidas de seguridad. «Hay demasiada tolerancia con el extremismo en este país«, sostuvo la funcionaria en un breve discurso, y agregó: «Ha llegado el momento de decir: «¡Ya hemos tenido bastante!«. Las cosas tienen que cambiar a la hora de hacerle frente«. Aquí se aprecia una grave contradicción en su modelo político, ya que ella misma fue la que anunció meses atrás la reducción de salarios a las fuerzas de seguridad, las cuales se encargaban específicamente de luchar contra el terrorismo. Entre sus últimas medidas, la conservadora les repuso esa quita que había sido repudiada por la población.

Con muchas críticas hacia su gestión y en medio de atentados, May debe afrontar las elecciones legislativas que se realizarán el próximo 8 de junio. Hasta hace poco, las encuestas la colocaban por encima de su candidato opositor Jeremy Corbyn, aunque a principios de mes todo se dio vuelta.

Según la publicación de «The Times», la primera ministra no conseguirá la mayoría absoluta en los comicios, lo que hará difícil que pueda gobernar en solitario. Estiman que el partido de los laboristas ganará casi 30 escaños en la Cámara de los Comunes, una situación no esperada por May cuando convocó las elecciones con el objetivo de sumar más bancas y reforzar su liderazgo de cara al «brexit».

«No podemos permitir que la violencia interrumpa el proceso democrático«, dijo la ‘premier’, que sin perder la confianza, ratificó: «las elecciones seguirán adelante tal y como estaba planeado».