Qué dice la autopsia sobre la muerte de Débora Pérez Volpin

Publicado el 11/04/2018

Una perforación en el esófago, combinada con el suministro de aire durante la práctica de la endoscopía resultaron factores decisivos en la crisis que sufrió Débora Pérez Volpin y que finalmente desembocaron en su muerte hace más de dos meses.

Esto se desprende del informe definitivo de la autopsia que se presentó oficialmente este miércoles en una conferencia brindada por la familia de la periodista y el abogado que los representa en la causa.

Según sus declaraciones, el estudio de anatomía patológica practicado sobre el cuerpo de la periodista confirma una perforación en el esófago a cinco centímetros del hueso hioides. Tras la perforación, el aire del endoscopio provocó un enfisema subcutáneo, es decir, una condición ocasionada por la penetración de aire en los tejidos subcutáneos. El aire también llegó al tórax y a la cavidad peritonea.

Durante la conferencia, el letrado Diego Pirota cuestionó a la clínica La Trinidad de Palermo y le adjudicó toda la responsabilidad. “La muerte de Débora se produjo por una perforación instrumental del esófago: no tenía ni una úlcera ni una hepatitis. Nada de lo que dijo la clínica, ni en on ni en off, es verdad. Acá esta la verdad. De esto murió Débora“, afirmó en la Legislatura Porteña, donde habló en compañía de Enrique Sacco, pareja de Débora.

El informe pericial es contundente e incontrastable. Es abrumador y ha sido realizado por muchos peritos que participaron. Estos dos meses tuvimos dificultades con el juez, que tenía que hacer medidas de prueba y no las hizo“, añadió Pirota, criticando también al encargado de investigar lo ocurrido.

“Hemos buscado que se produzcan medidas de prueba para que se sepa de qué murió Débora, por qué, y sólo nos restan algunas cuestiones relacionadas a cómo murió. Ya no hay cuestiones que se puedan decir de manera tergiversada o falsa”, añadió, y pidió que “la clínica aporte los listados del personal que intervino, de los registros de distintos equipos que quedan en enfermería, de todo lo que pasa en el quirófano”, y explicó que “como no se allanó, se pidió casi por favor a la clínica”.

“No tenemos elementos para pedir las detenciones del endoscopista o el anestesista: no hay elementos para creer que pueden entorpecer la investigación. No así con las autoridades de la clínica. Tuvieron plena conciencia, por ser médicos, sobre qué fue lo que pasó para que se produzca semejante desastre. Primero les dijeron que había incertidumbre, con una serie de conjeturas que se hicieron a ‘Quique’ y a los profesionales médicos a los que obviamente no les cerraba la explicación, porque ellos entienden del tema”, sentenció.

Quique Sacco, por su parte, destacó que con el informe de la autopsia la familia de Débora Pérez Volpin tiene “la verdad” de lo que ocurrió, y cerró: “Sostengo, en nombre de la familia, que no tenemos rencores ni sed de venganza. Solo queremos la verdad, y aquí la tenemos. Este punto es lo que nos va a permitir a toda la familia abrazarnos y conseguir un poco de paz».